
Al escuchar al Papa Francisco, entendí su mensaje de la siguiente forma, la cual comparto con ustedes.
El Papa Francisco en su visita a Paraguay manifestó su preocupación nuevamente por los más pobres y desprotegidos, como una constante que se repite, señalando que es una responsabilidad de todos de ver por los más débiles y desprotegidos.
También tocó el tema de los jóvenes, señalando que tenemos que pensar en ellos y darles oportunidad de poder desarrollarse y tener trabajo.
El Papa Francisco, en su mensaje, señaló que el ser humano debe ser el centro y objetivo principal, con lo cual ilumina nuestro enfoque y nos hace ver lo erróneo en que hemos caído, cuando los esfuerzos de estos tiempos no están dirigidos a metas que busquen el bienestar del hombre, sino a metas de producción frías y fustigó al Narcotráfico, corrupción y a las ideologías como generadoras de los más grandes males para la humanidad, en cuanto provocan pobreza y enfrentamiento entre los hombres.
Esta realidad, que se está viviendo, es contraria al mensaje evangélico del Amor de Cristo, que dirige toda su atención a los hombres de todos los tiempos y es de tal manera su Amor, que da su vida por nosotros.
Los aspectos que critica, no se centran en el bienestar del ser humano, sino desde el trono del egoísmo más cruel y con fachadas de engaño, la búsqueda del Dinero del Poder y los Placeres.
Puede ser que reciba críticas, y seguramente será, de quienes pongamos por encima de nuestros hermanos a nuestros intereses injustos.
¿No cree usted, que si ponemos en el centro de nuestro Amor al ser humano, construiríamos un mundo mejor, como dijo el Papa Francisco?.- AAGA.